Hay ciertas situaciones en esta vida que, en contra de todo nuestro pronóstico, o haciendo caso omiso a nuestras ingenuas expectativas, nos sorprenden por completo. ¿Quién no ha empezado un libro, una película, una serie… alguna vez, y se ha visto fascinado por el recorrido y el desenlace, los cuales difieren de lo que se preveía inicialmente? Pues algo similar vivimos los Starters que acudimos al taller Descubre el líder que hay en ti, en la Universidad Carlos III de Getafe.
Con motivo de la inauguración de la campaña 2016-2017, y tras una semana de emociones fuertes en la convención del South Summit, el grupo Start UC3M pudo participar en un evento de aforo limitado, liderado por el proyecto Factoría de Talento Adecco, y con Pablo Burgué como representante y conductor de la actividad.
Muchos de nosotros, servidor incluido, aguardábamos lo que se supone iba a ser una charla (término que, por cierto, se utiliza cada vez de un modo más coloquial) sobre las diversas maneras en la que uno puede encontrar el líder que lleva dentro. En ningún caso llegamos a sospechar que el núcleo de la efeméride se centraría en unos viejos conocidos… piezas de Lego.
Y es que, esta técnica de ‘jugar’ con estos tan sumamente queridos ladrillos de colores, conocida como “Lego Serious Play” es muy utilizada en las empresas para conseguir que los empleados saquen su lado más humano, desentierren algunos de sus sentimientos o añoranzas más profundos, y se redescubran a sí mismos, fomentando la motivación y la incentivación a la hora de cumplir determinados objetivos.
En nuestro caso, se nos propusieron diversas pruebas de construcción con temporizador, respondiendo todas ellas a un denominador común: el liderazgo.
¿Qué es para ti un buen líder? ¿Cómo te ves a ti mismo como líder? ¿En qué sentidos puedes acrecentar tus aptitudes de liderazgo? Fueron algunas de las propuestas a las cuales, los Starters debíamos dar sentido con una figura de Lego construida con nuestras propias manos (pique por quedarse con las mejores piezas incluido). Al finalizar el tiempo, uno por uno comentamos el porqué de nuestra figura, su simbología y el significado que la envolvía. De hecho, salieron algunas respuestas muy interesantes que invitaban a la reflexión, cumpliéndose aquello que ya hemos dicho sobre el poder de esta actividad para profundizar en nuestra psique.
Gracias a la colaboración de Pablo y la de los Starters más veteranos, vivimos una experiencia muy amena. En general, el ambiente estuvo inmerso en una gran positividad por parte de todos, y el ‘buenrollismo’ fue la nota dominante de la tarde. Pudimos darnos cuenta de algunas de nuestras facetas de la vida diaria que, quizás, podemos mejorar con un poquito de esfuerzo. Además, sirvió para acercar a todos los miembros de este grupo entre sí, sin importar la edad ni la diversidad de carreras o los gustos.
De hecho, ser Starter significa eso: colaborar juntos, favorecer la cooperación entre todos y, sobre todo, acudir a eventos en los que aparte de pasarlo bien, se aprende. Para la próxima no me lo pensaría dos veces… ¿Te apuntas?
